USO DE SUBPRODUCTOS DE LA FAUNA SILVESTRE EN EL CARNAVAL DE ORURO
El pasado 28 de marzo, el representante de la Asociación de Conjuntos Folklóricos de Oruro indicó que las plumas que se utilizan en el carnaval son importadas de África, Europa e incluso del Brasil. Asimismo, se acotó que Sara Argata tiene licencia para importar esos productos desde hace años atrás. Probablemente sea cierto. Sin embargo, el uso de subproductos de la fauna silvestre en el carnaval de Oruro por distintas fraternidades ha despertado una polémica entre instituciones que adoptan diversas posiciones.
Creemos que el tema amerita un abordaje técnico, por lo que este artículo pretende aportar al debate desde esa competencia. Dos estudios realizados por la Facultad de Ciencias Agrícolas, Pecuarias y Veterinarias de la Universidad Técnica de Oruro, podrían ser ilustrativos a efectos de establecer la relación del uso de subproductos de la fauna silvestre en el carnaval y su efecto en la población de diferentes especies de la fauna en el municipio de Santiago de Andamarca, para tomar un caso.
En el estudio sobre el uso de subproductos de la fauna (Vargas, 2005), se señala que en la entrada del Carnaval de Oruro participan 22 danzas (entre folklóricas y estilizadas), las cuales son ejecutadas por 48 fraternidades y/o conjuntos. De todas ellas, se identificó que las danzas que usan subproductos de la fauna silvestre son: Morenada (dos conjuntos), Tobas (tres conjuntos), Suri Sicuri (dos conjuntos), Thinkus (tres conjuntos).
Vargas (2005), en su trabajo señala que el Conjunto Morenada Central Oruro decidió usar matracas (caparazón de quirquincho) el año 1954. En el mencionado año, 30 danzarines componían el bloque “Morenos”, de lo que se deduce que se utilizaron 30 matracas de quirquincho (Beltrán, 1961). En 1993, este grupo se divide en: Morenada Central Oruro y Morenada Central Oruro fundada por la comunidad Cocanis. De cualquier manera, el bloque “Morenos” de los dos conjuntos continuaron utilizando las referidas matracas. Estas agrupaciones de danzarines solían usar, también, plumas de suri sobre el sombrero, aunque, al parecer, en los últimos años estas se han sustituido por material sintético.
En la entrada del carnaval del 2003, en la Morenada Central Oruro había 469 danzarines de los cuales 130 tenían matracas de quirquincho. En la Morenada Cocanis, los componentes sumaban un total de 694. De ellos el bloque de “Morenos” contó con 283 participantes que usaron matracas (Vargas, 2005). En suma, se habrían utilizado, en tal ocasión, 413 matracas. Estos datos difieren del estudio realizado por Aguirre L. F. (2005) en el que se menciona que en el carnaval de 2005 se usaron 691 quirquinchos. Esta diferencia podría atribuirse al incremento del número de bailarines en ambos conjuntos.
Por otro lado, los danzantes de los Suris Sicuris (Suri Universitario y Suri Estilizado) en su vestimenta utilizan plumas de suri. El conjunto Suri Universitario tuvo alrededor de 30 bailarines que usan plumas de suri, de ellas se pudo cuantificar 4340 plumas equivalentes a 15 suris. Mientras que el Conjunto Estilizado Suri Sicuri usaron 2190 plumas en sus sombreros que equivalen a 8 individuos, sumando entre ambas a 23 suris.
La vestimenta de la danza de los Tobas (Tobas Zona Central, Tobas Zona Sud y Tobas Uru Uru), incluye el uso de plumas de suri en sus “chuncheras” y corona (bloque Cambas, Chunchos, Chipayas, Abuelos y Brujas, Macheteros). Haciendo algunos cálculos tendríamos que para el disfraz de 183 danzarines, en los Tobas Central, se habrían sacrificado 276 ejemplares de suri; en los Tobas Zona Sud, los suris sacrificados equivaldrían a 210 por 131 bailarines; mientras que los Tobas Uru Uru habrían sacrificado el equivalente a 82 suris. El total de suris sacrificados alcanzaría a 568 individuos entre las tres fraternidades.
En la danza de los Tobas también se utilizan alas de flamenco. Entre los tres conjuntos arriba mencionados aprovecharon 121 flamencos o pariguanas. Entre otras especies que se usaron en los tres conjuntos de los Tobas están: zorro (400 ejemplares), felinos; gato de pampa, gato andino, puma andino (80 individuos), rapaces (60 animales), buho, yaca yaca (50 aves), totalizando 590 individuos de la fauna silvestre (Vargas M., 2005).
La vestimenta de otras danzas como los Thinkus (Huajchas, Tolkas Jairas) también contempla la utilización de plumas de Suri, las cuales se usan en los sombreros y las monteras. Se estima que para el vestuario de 1171 danzarines, en los tres conjuntos mencionados, se sacrificaron 41 suris hasta el año 2003.
El acceso a estos subproductos en el mercado es sencillo. Se comercializan libremente en los mercados de la ciudad de Oruro (Fermín López y Campero) y en las diferentes ferias regionales (Huari, Challapata, Oruro, Caracollo) o, en su defecto, los comerciantes de lana y cuero los venden en sus tiendas.
Habrá que añadir que los subproductos de la fauna no solamente se utilizan en el vestuario de los danzarines, sino que también se aplica en la fabricación de instrumentos musicales, como es el caso de la utilización de caparazones de quirquincho en la fabricación de charangos. O, en el caso de los mismos quirquinchos, se los utiliza para extraerles la grasa con fines medicinales, su carne es comestible. Su caparazón es utilizado como amuleto y adorno, inclusive muchos los tienen como mascotas.
Por otra parte, sería importante conocer algunos datos de la población de estas especies silvestres. Precisamente Ronald Choque (2009) de la Facultad de Agronomía hizo un estudio de la población de la fauna silvestre en el municipio de Andamarca y arribó a los siguientes resultados: 337 suris, 4 cóndor, 1379 ejemplares de vicuña. La población de zorros llega a 32, mientras que las águilas son 43 unidades; las perdices son las más numerosas, en total asciende a 2256 individuos; los gatos andinos suman 30; la población de quirquinchos es de 1084 ejemplares; los halcones son 21 unidades y finalmente las lechuzas totalizan 28 individuos en los tres cantones del municipio. Queda pendiente un estudio más preciso que establezca la relación del impacto del uso de subproductos de fauna silvestre (en el carnaval) en la población de especies.
El hábitat de estas especies son las zonas áridas, dunales (extensas zonas de arena), pajonales y tholares (lampayares), lo que es característico el occidente del departamento de Oruro. Las poblaciones mencionadas se encuentran en toda la meseta central y sud del altiplano (Choque, 2009).
A modo de ir cerrando estos apuntes, creemos que sería importante trabajar en aspectos como: actualizar la inventariación del uso de los subproductos por las diferentes fraternidades en el carnaval, prohibir las nuevas adquisiciones que implican sacrificar las especies, reemplazar paulatinamente por otros productos sintéticos, estudiar la población de la fauna silvestre en el departamento de Oruro, incentivar los zoocriaderos de quirquinchos, suris y otras especies, con el objetivo de repoblar y, definitivamente, sancionar y castigar a los cazadores furtivos.
El presentar justificaciones con argumentos o sin ellos no resolverá el problema, más bien puede profundizar el conflicto. El trabajo interinstitucional entre el Viceministerio de Medio Ambiente, Biodiversidad y Cambios Climáticos, Prefectura de departamento, Asociación de Conjuntos Folklóricos de Oruro, Universidad Técnica de Oruro, municipios e instituciones afines a la protección de la biodiversidad debería orientarnos a emprender acciones que contribuyan a la protección y conservación de la biodiversidad del ecosistema de alta montaña.
Norma Mollo Mollo
COORDINACION LIDEMA-ORURO
CEPA – PASCAROR