Nº797: el Día del Trabajador y el Medio Ambiente, entrevista realizada a Hno. Gilberto Pauwels, director del CEPA, 29-04-13

EL DIA DEL TRABAJADOR Y EL MEDIO AMBIENTE.

Entrevista al Hno. Gilberto Pauwels, director del Centro de Ecología y Pueblos Andinos (CEPA).

Julián Arias: El primero de mayo es el día del trabajo y del trabajador. ¿Qué significado puede tener este día para una institución como CEPA que se dedica al medio ambiente y a las culturas?

Gilberto Pauwels: Mucho significado y por varias razones. En primer lugar porque el sector de los trabajadores del medio ambiente es un sector del mundo obrero que está creciendo más rápidamente. Muchas industrias se ven obligadas a contratar personal para cumplir con las exigencias de las leyes ambientales en operaciones que cada vez más están utilizando productos químicos a veces sumamente peligrosos y venenosos. Cuando actualmente se inicia una nueva empresa, los primeros trabajadores que contratan son del área del medio ambiente para preparar el terreno y cuando se clausura una industria o mina ellos son los últimos en irse, porque se debe dejar todo limpio. Los trabajadores del medio ambiente merecen una legislación especial porque en su trabajo enfrentan peligros y riesgos particulares que merecen ser reglamentados.

Julián: Pero a veces los ambientalistas son considerados como enemigos de los trabajadores, por poner en riesgo los puestos de trabajo a consecuencias de sus exigencias ambientales.

Gilberto: Lo que acabo de decir demuestra lo contraria: más rígidas que sean las exigencias ambientales, más trabajadores se necesita para cumplir. La ecología es por el momento el sector industrial con mayor crecimiento porcentual de trabajadores. Pero no hay que olvidar que estamos trabajando de todos los trabajadores. Si alguna vez los ambientalistas se oponen a industrias extractivas en una determinada región o cuestionan una determinada tecnología, es casi siempre para preservar otras fuentes de trabajo, sea en la agricultura, la ganadería, la pesca y la caza, el turismo, u otras. En algunos casos se trata de dar preferencia a recursos renovables en vez de agotar a corto plazo recursos no-renovables. Defender la naturaleza es al mismo tiempo defender fuentes de trabajo, pensadas a mediano y largo plazo. Por eso el componente socio-ambiental de la fiesta del 1 de mayo va ir creciendo.

Julián: ¿Por qué dices SOCIO- ambiental? ¿A qué aspecto social te estás refiriendo?

Gilberto: En primer porque se trata de la defensa de toda la familia trabajadora, de la salud de todos. El 1 de mayo se refiere a la calidad de vida de toda la familia obrera y este implica la lucha en pro de la salud, en contra de la contaminación en todas sus manifestaciones, tanto la acústica como la del aire, tanto la alimentación como el agua potable.

Pero hay algo más, que sobre todo a la clase trabajadora le interesa. Se trata del hecho que las transnacionales y los compradores de nuestras minerales, nos quitan las riquezas y nos dejan las basuras, y no recibimos lo que se nos debe por este canje tan desigual. Damos oro y recibimos cianuro. Entregamos metales preciosos y nos quedamos con metales pesados en nuestra alimentación, en los peces y hasta en la leche de las vacas. Sobre esta problemática  antes, tantas veces hemos cantado: “que nadie escupa sangre para que otros vivan mejor”, pero actualmente ya no será tanto por la silicosis, sino por el cáncer. Nuestras minas de oro ya eran rentables cuando el precio del oro estaba cinco veces menor  (300 us$ por onza troy) que actualmente (alrededor de 1500). ¿A dónde ha ido toda esta ganancia imprevista? ¿Se ha aprovechado la oportunidad para tomar alguna medida extra para cuidar el medio ambiente o la salud de los trabajadores? Son temas apropiados para el día del trabajo.

Julián: Trabajadores mineros y metalurgistas vs. trabajadores agricultores, ganaderos, pescadores,… y en medio de eso  los agro mineros como nuevo grupo social. Comunidades y barrios afectados frente al saqueo de nuestras riquezas, que otros se llevan lejos de los peligros y riesgos a que nos exponemos los que optamos por quedarnos en Oruro.  ¿Es esa la problemática que deberíamos discutir a ocasión del día del trabajador?

Gilberto: No se trata tanto de una confrontación entre grupos sociales en la sociedad; se trata más bien de defender los intereses de nuestro departamento. Muchos problemas regionales son causados por la irresponsabilidad de los que se apoderaron de las riquezas y los medios de producción. En este contexto, creo que se deberían buscar más alianzas entre organizaciones sociales que confrontaciones.

Julián: ¿Cuáles son los grandes problemas regionales a que te refieres?

Gilberto: Ay, es una pregunta que nos puede llevar muy lejos. Me limitaré a recordar algunas preocupaciones regionales:

  • El agua potable. Estamos consumiendo aguas fósiles, quiere decir: aguas que no se renuevan por las lluvias. De nuestras aguas dulces y potables utilizamos gigantes cantidades para fines industriales. Está bien que nos preocupamos por los “juegos con agua” en Carnavales, que educamos a la población en el uso racional del agua, pero también es necesario informar y concientizar sobre el consumo diario por fines no domésticos. Las empresas deberían reciclar el agua que contaminan y volver a utilizarla. Es inversión y significa contratar trabajadores.
  • Las aguas contaminadas. No me refiero solamente a las aguas negras urbanas. Día y noche estamos bombeando desde el subsuelo miles y miles de litros de aguas ácidas y saladas, solamente para mantener secos tajos y galerías para las operaciones mineras. Agua contaminada degrada tierras, ríos y lagos, praderas y chacras. Es inevitable bombear; es difícil que todo se evapore  sin infiltrar y arruinar tierras y aguas para siempre. Pero son precisamente estas aguas que podrían ser recicladas para reutilizar en las operaciones mineras. ¿En qué medida debemos seguir aceptando que se gastan aguas dulces y se producen sin cesar aguas inservibles, mientras que existen tecnologías para reducir estos daños? Indudablemente significa gastos, inversión, pero también contratación de obreros.
  • La urbanización. La ciudad y las ciudades intermedias siguen creciendo. Ya se ha hecho esfuerzos para que las industrias salgan de los centros urbanos, pero queda mucha que hacer. La historia de Oruro ha sido un proceso de transformación del “asiento minero San Miguel” (1606) a una ciudad. Cada vez más está en juego la salud pública de una población creciente. ¿Qué porcentaje del subsuelo del radio urbano, intensivo e extensivo, sigue como concesiones mineras? ¿Cómo vamos a asegurar para cada vez más pobladores, bienestar y “vivir bien”?
  • La totora y otras plantas acuáticas. Históricamente  ha sido la totora que dio vida a la región, como sustento para la pesca, la caza y la ganadería y muchos quehaceres domésticos. Actualmente la cantidad y la calidad están disminuyendo de una manera alarmante.
  • La quinua y la horticultura. No solamente están en peligro los recursos del pasado, sino también las nuevas oportunidades que se nos presentan como el cultivo de la quinua. Nuestra tierra es apta y sana para una serie de cultivos que nos pueden dar seguridad alimentaria y hasta ingresos por el intercambio y comercio con otras regiones. Pero ¿Cuántas tierras ya no van a servir nunca para cultivos orgánicos? Grandes posibilidades de trabajo a mediano y largo plazo están en peligro.

Estos son solamente algunas ejemplos de oportunidades y posibilidades que tenemos y que no podemos perder. Oruro es alto, frio, seco, encerrado, salado, arenoso, saqueado ya en el pasado, durante siglos marginado y excluido,…. tenemos muchas limitaciones, pero también culturas y habitantes, hombres y mujeres, trabajadores, valientes y humanamente ricos en valores y sabiduría.

Julián: Tu esperanza para el día del trabajador está sobre todo en los mismos obreros, en el pueblo mismo de Oruro, que debe seguir enfrentando estas realidades, cuidando los recursos naturales que tenemos.

Gilberto: Si, la esperanza está en los trabajadores del campo, de las fábricas y minas y de toda clase de actividades, pero trabajadores no solamente como clase social, sino con todo su equipaje histórico y cultural, digamos. En Bolivia, los obreros nunca se han preocupado exclusivamente por sus propios intereses, sino por la suerte de todo el pueblo. Mientras que logramos mantener este espíritu – espiritualidad casi digo -, también la Madre Tierra está en buenas manos, porque ella es parte de la vida del pueblo.

Julián: Terminemos felicitando a todos los trabajadores de Bolivia en su día, pero como CEPA y LIDEMA especialmente al grupo creciente de los que se dedican cada día directamente o en forma indirecta a la preservación y el aprovechamiento responsable de los recursos naturales, que son patrimonio del pueblo.

Julián Arias
CEPA – LIDEMA ORURO